Los 80 de mi madre, un festejo significativo que merecía un regalo igual de importante desde lo afectivo.
¿Y si le resumo en unos pocos versos su historia de inmigrante? ¿Y si a los versos le agrego algunas fotos alusivas? Así es como nace en el 2000, “Alice, la pequeña suiza”. Pequeño librito de hechura artesanal con los pocos recursos disponibles en aquellos tiempos. El original, obviamente para la agasajada y algunas copias para los familiares más cercanos.
¿Y si repetimos la experiencia? ¿Y si para cada navidad reunimos lo que pude haber escrito en el año, lo editamos en forma casera y lo regalamos a nuestros afectos?
Aparecen entonces “Garrotillo”, “Mujeres”, “Coplas y Otras Yerbas” y otros, que se suceden casi anualmente hasta el año 2008, conformando una rutina pre-navideña. Yo recopilando las pocas líneas escritas, y mi esposa, siempre cómplice y partícipe indispensable de mis locuras, haciéndose cargo del copiado, edición y encuadernado.
A partir de ese año, continúan algunos escritos pero ya sin difusión hasta que en el 2019 realizo mi primera publicación formal, una pequeña recopilación de cuentos bajo el título de “Cuentos del Lagartijo”. Esa primera experiencia me anima a continuar con esta segunda publicación, de poemas, que reúne a modo de antología el contenido de los antiguos “libritos” y lo escrito con posterioridad.
Prólogo del autor
El autor, JUAN CARLOS CASTRO, nace el 23 de febrero de 1957 en la ciudad de San Francisco, provincia de Córdoba.
Con pocos meses de vida se traslada con su familia a la ciudad de Esperanza, provincia de Santa Fe, donde transcurren su infancia y adolescencia y cursa sus estudios hasta obtener el título de Médico Veterinario de la U.N.L. en el año 1980.
Para ejercer la profesión, se establece en 1981 en la localidad de Pasco, provincia de Córdoba y a su labor de Médico Veterinario Rural, le suma la actividad Docente en el I.P.E.A. N° 218 de la misma población.
Es también en Pasco donde conoce y desposa en 1988 a su compañera y madre de los tres hijos que completan su familia.
Actualmente sigue residiendo en el mismo pueblo, retirado ya de su actividad profesional y docente, retomando lo que siempre hizo como pasatiempo, escribir, utilizando el seudónimo de JUAN TEYÚ.